martes, 12 de junio de 2012

Auto-observarse.

Ya no creía en nada. Había pasado toda su vida entre dicotomizaciones totalmente absurdas y, por supuesto, seguía haciéndolo porque ella poseía la verdad absoluta de todo y de nada.
Comenzó pensando que podía confiar en las personas, en cualquiera, ¿por qué no? nadie iba a ser tan malo de traicionar a una chica con buenas intenciones, ¿no?
Acabó pensando que mejor trasformarse en la persona mala que traiciona para demostrar que no se puede confiar en nada ni en nadie... sabía que se equivocaría... pero tenía que probar algo diferente, algo que ella jamás hubiera hecho, algo que ella siempre hubiera criticado: "ponerse al mismo nivel", "pagar con la misma moneda";  bueno, todo consiste en colocarse en esa nueva posición y observarse, a lo mejor se descubre un nuevo yo, quién sabe.

By Loim.

3 comentarios:

  1. Lore!, te sigo por aquí también. Me gustan tus entradas, pero esta me ha llamado aún más la atención.
    Tienes razón, ya está bien de ser las buenas. A darle duro al mundo.

    Un beso! ^^

    ResponderEliminar
  2. Gracias, Alex. Esta entrada la hice con muchos palos seguidos en el cuerpo y bueno, tal vez no me mantengo tan firme, pero sí que pienso que tenemos que hacernos notar y, sobre todo, respetar. La carita de niña buena no nos vale ya para mucho...
    Tengo ganas de verte,
    un besito :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hay mucha gente, vampiros emocionales como creo que tú los llamaste también alguna vez, que se dedica a alimentarse de tus errores y fracasos. Hay que ser mejor que ellos. Ser el lobo con piel de cordero, antes de que descubran ellos su verdadera cara.

      A ver si nos vemos prontillo, corazón ^^

      Eliminar